Este complejo residencial de Arum Group, localizado a 30 kilómetros de Barcelona, tuvo una excelente acogida en el mercado por su combinación entre privacidad, oferta de ocio y espacio para la vida social y cultural de la comunidad.
Con la misma propuesta de valor, la compañía ha evolucionado con éxito hacia la creación de segundas residencias de lujo para el mercado internacional, cuyo interés aumenta en el actual contexto de inflación: “porque es un activo que se revaloriza y por las rentas adicionales que se pueden obtener de su explotación”, afirma su director de Real Estate, Francesc Pujol.
Zonas verdes, construcciones sostenibles y espacios donde hacer comunidad. Estas son las tres tendencias de las familias que compran una propiedad, interesadas cada vez más en una residencia cercana a la ciudad donde trabajan, pero lo suficientemente aislada para llevar una vida tranquila donde sus hijos e hijas puedan disfrutar del aire libre en un lugar seguro.
Estas preferencias están hoy más en boga que nunca desde que la pandemia forzara el teletrabajo, una fórmula que en la actualidad está más que consolidada. Arum Group, compañía especializada en la creación de propiedades inmobiliarias tuvo la visión de conceptualizar un proyecto a la medida de estas necesidades hace ya 20 años. Se trata de El Solell de Santa Agnès, en pleno Montseny, en el Vallès Oriental, una urbanización situada a menos de 30 kilómetros de Barcelona, que ha resultado ser uno de sus casos de éxito cuando comenzaba un proyecto empresarial que ha ido evolucionando hacia la venta de residencias de lujo asociadas a exclusivos resorts para el mercado internacional.
Francesc Pujol, director de Real Estate de la compañía, explica que “El Solell fue concebido con mucho detalle para satisfacer a un perfil de comprador: parejas jóvenes con hijos que trabajaban en Barcelona, el Maresme o el Vallés, amantes de la naturaleza y que querían disfrutar de viviendas diseñadas con estilo”. La urbanización tuvo una gran acogida en el mercado. El proyecto se inició en 2001 y culminó en 2010 y fue la primera comunidad residencial del Vallès Oriental.
“Conseguimos construir un proyecto que estéticamente sobresalía de lo que se había hecho hasta la fecha y que integraba edificación y urbanización de forma muy acertada”, explica Pujol. El propósito era que cada familia pudiera desarrollar su vida personal y social plenamente gracias a las instalaciones deportivas, servicios y zonas verdes que incorporaba. “La urbanización se diseñó con criterios de elevada calidad, manteniendo la uniformidad en su conjunto: las vallas de las viviendas, la posición de estaciones transformadoras, buzones, pero también incorporando variedad, siempre en armonía con el entorno, por ejemplo en los colores de las fachadas”.
Defensa de una construcción sostenible, marca de la empresa
La sostenibilidad fue otra de las innovaciones de esta urbanización. En ella se empezaron a aplicar los principios de una construcción sostenible “diseñando las casas aprovechando al máximo la luz solar con materiales muy aislantes”. Además, los espacios verdes cuentan con vegetación autóctona, que precisa menos riego.
Hoy, la sostenibilidad marca cada paso del proceso de construcción para Arum Group: “En la actualidad, instalamos placas solares o fotovoltaicas para reducir el consumo energético de las viviendas y usamos la aerotermia como método de energía en casi todas nuestras viviendas. Tenemos mucho cuidado con la protección solar a base de estores y aislamientos de calidad, utilizamos agua obtenida de plantas desalinizadoras. También recurrimos, y cada vez más, a las cubiertas ajardinadas, que minimizan el efecto calorífico del sol”.
Por otro lado, otro de los sellos de Arum Group es fomentar el sentido de pertenencia y poner en valor las relaciones y la vida social. “Procuramos que el comprador se sienta miembro de una comunidad y orgulloso de vivir en la misma. Para eso creamos eventos sociales y culturales donde los propietarios puedan disfrutar de las bellezas naturales y culturales de los alrededores y puedan conocerse entre ellos”.
El Solell de Santa Agnès cuenta con instalaciones deportivas: pistas de pádel, campo de fútbol, piscina y un circuito de footing. Su paisajismo y su buena conexión en transporte público o privado con Barcelona, la playa y otras ciudades cercanas, hacen de esta urbanización un ejemplo de convivencia entre el confort, la privacidad, el ocio y el deporte, integrando un cuidado paisajismo y acceso a espacios que fomenten relaciones sociales en un mismo enclave.
En la actualidad, Arum Group se ha especializado y posicionado con éxito en la creación de principio a fin de residencias de lujo asociadas a exclusivos resorts de marcado perfil internacional. “Construimos viviendas cada vez más sostenibles, pensadas para el teletrabajo, con equipamientos deportivos comunitarios, amplias terrazas y jardines. En estos momentos de elevada inflación, la inversión en inmobiliario de uso turístico es una buena salida a los ahorros de los particulares, ya que además de la revalorización del activo, obtienen unas rentas adicionales de la explotación de la vivienda”, concluye Pujol.
Sobre Arum Group
Arum Group es una compañía promotora única en el sector inmobiliario que reúne el talento de grandes referentes profesionales para ofrecer a sus clientes proyectos exclusivos. Su especialidad es crear destinos turísticos y residenciales o de uso mixto, atractivos para visitantes internacionales que deseen amplias viviendas en espacios únicos para vivir, descansar y teletrabajar. Diseña, desarrolla, estructura y gestiona proyectos que velan por la protección del entorno. Entre ellos destacan varios desarrollos inmobiliarios en Abama Resort Tenerife, como el espacio comercial y de ocio Plaza Abama y los hoteles de branded residences Los Jardines de Abama Suites y Las Terrazas de Abama Suites, y en La Manga Club, en Murcia, el proyecto del Centro Comercial El Boulevard y las promociones de villas de Las Acacias y los apartamentos Las Orquídeas.