Bajo el título ‘Gestión Ambiental en las Islas: Retos y Sostenibilidad’, el instituto de la ULPGC organiza en febrero una formación que esgrimirá los desafíos a los que se enfrentan islas como la grancanaria, de alta densidad demográfica y con un gran volumen turístico, para mantener su crecimiento minimizando el impacto en su medio ambiente, siendo crucial la diversificación de su economía disminuyendo su dependencia de los combustibles fósiles
El desarrollo sostenible es uno de los principales retos de futuro en Canarias, con especial relevancia en islas como Gran Canaria, que cuenta con una elevada densidad de población y que persigue seguir siendo un destino turístico de referencia de primer nivel mundial. Algo que debe llevarse a cabo generando el menor impacto en el medio ambiente insular. Para ello, la diversificación de la economía es crucial y ésta pasa por disminuir la dependencia de los combustibles fósiles y por incrementar la obtención de energía a través de tecnologías renovables (eólica y fotovoltaica).
Este y otros desafíos serán puestos en el foco en un curso denominado ‘Gestión Ambiental en las Islas: Retos y Sostenibilidad’, que, del 13 al 17 de febrero, organiza el Instituto Universitario de Investigación en Acuicultura Sostenible y Ecosistemas Marinos (IU-ECOAQUA) de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) que, en el marco de la ‘Escuela de Invierno’, se celebrará en la Sala de Piedra del Rectorado de la entidad universitaria.
Para el investigador Rodrigo Riera, del grupo de Biodiversidad y Conservación (BIOCON) del IU-ECOAQUA y miembro del comité organizador local de esta formación junto al director de BIOCON, Fernando Tuya, el reto del desarrollo sostenible manteniendo el nivel de vida actual en una isla como Gran Canaria, de alta densidad demográfica que quiere continuar siendo, además, primera espada como destino turístico mundial, debe pasar por “establecer una gestión integrada de los recursos y de su explotación, desarrollando iniciativas que promuevan este desarrollo cuidadoso con el medio ambiente a medio y largo plazo y propiciando la diversificación de la economía hacia nichos que no demanden gran cantidad de recursos, así como la optimización de los recursos actuales”.
Para que ese objetivo sea posible, asegura Riera, esa diversificación económica “debe partir del uso de las energías renovables, como la que proviene del viento o del sol, con el fin de reducir la dependencia hacia combustibles contaminantes. Pero, también es crucial potenciar la localización geográfica de la isla como nodo de unión entre continentes, el africano y el americano, a través de mejores y más eficientes conexiones de los servicios portuarios y aeroportuarios y de las redes de comunicación. Además, el impulso a formas agrícolas sostenibles con el medio ambiente y el desarrollo sostenible de la acuicultura en mar abierto forman parte de las iniciativas para disminuir nuestra dependencia del exterior y en ello debemos seguir ahondando”.
Estos serán, entre otros muchos asuntos, temas que se abordarán en un curso que cuenta con la colaboración de la Universidad de Groningen (Países Bajos) destinado a todas las personas interesadas en los ecosistemas isleños, principalmente estudiantes universitarios, personal técnico e investigadores.
En este sentido, las islas constituyen casos especiales para el desarrollo sostenible. Desde el punto de vista metodológico y científico, son "laboratorios" ideales para la gestión sostenible del paisaje. Las islas son únicas tanto por su atractivo como por su vulnerabilidad climática, están relativamente aisladas y 'solas' en comparación con las zonas continentales, pero también son más dependientes y necesitan estar bien conectadas con otras áreas.
Este curso avanzado, que se desarrollará en horario de 9 a 17 horas y cuyas plazas son limitadas a 20, aunque con posibilidad de ampliación en función de la demanda de los alumnos, pretende combinar de una forma analítica todas estas perspectivas diferentes, centrándose en Gran Canaria.
La formación tiene como punto de partida esta isla redonda, de 47 kilómetros de diámetro y una superficie de 1.560 km2, cuyo pico más alto, el Pico de Las Nieves (1.949 metros), está situado en su mismo centro. Los recursos naturales de Gran Canaria, como el buen clima a lo largo de todo el año, siempre han sido una fuente inagotable de felicidad para la población local.
Gran Canaria, considerada como un continente en miniatura, es todo un muestrario de paisajes poco usuales en medio de un archipiélago muy diverso. Por esta razón, la UNESCO concedió a la isla el sello de Reserva de la Biosfera, incluyendo a casi la mitad de su geografía, para respaldar de forma activa la conservación de las piezas que componen este puzle escenarios naturales que conforma un micromundo de naturaleza muy peculiar.
El curso contará con una larga lista de ponentes y moderadores de prestigio como el director del IU-ECOAQUA, Ricardo Haroun, el propio coordinador, Rodrigo Riera, y los investigadores Fernando Tuya, Andrej Abramic, Sandra Navarro, Lidia Robaína, Néstor Bosch, Víctor Cordero, Marcial Cosme y Yaiza Fernández-Palacios, por parte del IU-ECOAQUA; así como Godfrey Baldacchino, de la Universidad de Malta; Dimitris Ballas, de la Universidad de Groningen (Países Bajos); Carolina Peña y Abel Sanromualdo, del Instituto de Oceanografía y Cambio Global (IOCAG) de la ULPGC, Julieta Schallenberg, del GRRES (siglas en inglés de Grupo para la Investigación en Sistemas de Energías Renovables) de la ULPGC, y el doctor Jin Taira, del Grupo de investigación Ingeniería y Arquitectura en Turismo (URSCAPES) también de la ULPGC.
Para ampliar la información pueden consultarse los siguientes enlaces en castellano y en inglés: